Azucena Paradox
2004-09-03 11:35:56 UTC
Entre los libros leídos o releídos este verano he vuelto a descubrir esta
pequeña joya de Anouilh, más conocido por su "Antígona". Lo había leído en
COU por indicación escolar, pero lo recordaba mal.
La obra trata de un conflicto eterno, permanente, endémico: las difíciles
relaciones de poder entre la Iglesia y el Estado; en este caso el Estado
está representado por el normando rey de Inglaterra Enrique II, y la Iglesia
por el sajón arzobispo de Canterbury Thomas Becket, después subido a los
altares. No desvelaré más, pero si quiero comentar algo respecto a esta
excelente obra, que recomiendo sin duda alguna:
La pieza tiene multitud de acotaciones escénicas, absolutamente precisas y
pertinentes, que hacen más fácil no sólo el trabajo de puesta en escena,
sino la imaginación del decorado por parte del lector, que no tiene la
suerte de verla representada. No son acotaciones literarias, a lo
Valle-Inclán, sino puramente técnicas, pero ya digo que muy pertinentes.
Por otro lado, el conflicto planteado es sumamente interesante, con diálogos
chispeantes, inteligentes, de gran profundidad en ocasiones, y en otras
triviales y hasta cachondos. Véanse estos ejemplos, que no son, sin embargo,
los mejores:
DIÁLOGO 1
[Becket aún es un noble sajón, servidor y amigo personal del rey, y enemigo
de la Iglesia]
El Rey: Hablemos en serio, Becket. Ya sé que los sacerdotes arman
intrigas permanentemente, pero también sé que puedo hundirlos cuando quiera.
Becket: Hablemos en serio, Alteza. Si no los hundís en seguida, dentro
de cinco años habrá dos reyes en Inglaterra: el Arzobispo Primado de
Canterbury y vos. Y dentro de diez años, habrá uno solo.
El Rey: (un poco avergonzado). Y no seré yo, naturalmente.
Becket: (frío). Sospecho que no.
DIÁLOGO 2
[El Rey se dirige cínicamente a sus hijos, que juegan en una sala del
palacio]
El Rey: ¡Encantadoras criaturas, bocetos de hombres, ya hipócritas y
obtusos! Y pensar que hay que mirarlos tiernamente, con el pretexto de que
no son aún lo bastante grandes para ser odiados o despreciados... ¿Cuál de
vosotros es el mayor?
El hijo mayor: (se levanta). Yo, señor.
El Rey: ¿Cómo te llamas?
El hijo mayor: Enrique III.
El Rey: (severo): ¡No señor, todavía no! Enrique II goza de una
espléndida salud. (A la reina): ¡Linda educación, señora! ¿Ya os imagináis
regente? ¿Y os asombra todavía que no visite vuestros aposentos? No me
gustaría hacer el amor con mi propia viuda. Tengo derecho ¿no?
En la parte negativa, aunque es muy escasa, señalar el sesgo evidente que
tiene Anouilh en barrer para casa: el rey de Inglaterra es presentado como
un estúpido infantiloide, mientras que el rey francés es listo, justo y
buena gente... Nadie es perfecto.
La obra, ya digo, es corta, entretenidísima, de conflicto denso, interesante
y muy vigente, con diálogos que rozan lo magistral. Totalmente recomendable.
:-)
P.S. Qué cosas, entre sus páginas encontré un papelito amarillento impreso
con el siguiente texto:
Quote
ORGANIZACION SINDICAL
O.S. Educación y Descanso
EMBARCADERO
ESTANQUE DEL RETIRO
Embarcación nº ...........
Hora de desembarque ............
Personas: 1
Pesetas: 10 Nº 16854
Día ..................
Conserve este billete a disposición de los empleados que lo reclamen. Caso
de no tenerlo abonará otro billete.
Toda reclamación ha de hacerse antes de embarcar.
Todo aquel que se pase de su hora habrá de abonar el importe de un nuevo
billete sin derecho a seguir remando.
Este billete es nulo si va separado del triángulo de la derecha.
Unquote
:-DDDDDD
pequeña joya de Anouilh, más conocido por su "Antígona". Lo había leído en
COU por indicación escolar, pero lo recordaba mal.
La obra trata de un conflicto eterno, permanente, endémico: las difíciles
relaciones de poder entre la Iglesia y el Estado; en este caso el Estado
está representado por el normando rey de Inglaterra Enrique II, y la Iglesia
por el sajón arzobispo de Canterbury Thomas Becket, después subido a los
altares. No desvelaré más, pero si quiero comentar algo respecto a esta
excelente obra, que recomiendo sin duda alguna:
La pieza tiene multitud de acotaciones escénicas, absolutamente precisas y
pertinentes, que hacen más fácil no sólo el trabajo de puesta en escena,
sino la imaginación del decorado por parte del lector, que no tiene la
suerte de verla representada. No son acotaciones literarias, a lo
Valle-Inclán, sino puramente técnicas, pero ya digo que muy pertinentes.
Por otro lado, el conflicto planteado es sumamente interesante, con diálogos
chispeantes, inteligentes, de gran profundidad en ocasiones, y en otras
triviales y hasta cachondos. Véanse estos ejemplos, que no son, sin embargo,
los mejores:
DIÁLOGO 1
[Becket aún es un noble sajón, servidor y amigo personal del rey, y enemigo
de la Iglesia]
El Rey: Hablemos en serio, Becket. Ya sé que los sacerdotes arman
intrigas permanentemente, pero también sé que puedo hundirlos cuando quiera.
Becket: Hablemos en serio, Alteza. Si no los hundís en seguida, dentro
de cinco años habrá dos reyes en Inglaterra: el Arzobispo Primado de
Canterbury y vos. Y dentro de diez años, habrá uno solo.
El Rey: (un poco avergonzado). Y no seré yo, naturalmente.
Becket: (frío). Sospecho que no.
DIÁLOGO 2
[El Rey se dirige cínicamente a sus hijos, que juegan en una sala del
palacio]
El Rey: ¡Encantadoras criaturas, bocetos de hombres, ya hipócritas y
obtusos! Y pensar que hay que mirarlos tiernamente, con el pretexto de que
no son aún lo bastante grandes para ser odiados o despreciados... ¿Cuál de
vosotros es el mayor?
El hijo mayor: (se levanta). Yo, señor.
El Rey: ¿Cómo te llamas?
El hijo mayor: Enrique III.
El Rey: (severo): ¡No señor, todavía no! Enrique II goza de una
espléndida salud. (A la reina): ¡Linda educación, señora! ¿Ya os imagináis
regente? ¿Y os asombra todavía que no visite vuestros aposentos? No me
gustaría hacer el amor con mi propia viuda. Tengo derecho ¿no?
En la parte negativa, aunque es muy escasa, señalar el sesgo evidente que
tiene Anouilh en barrer para casa: el rey de Inglaterra es presentado como
un estúpido infantiloide, mientras que el rey francés es listo, justo y
buena gente... Nadie es perfecto.
La obra, ya digo, es corta, entretenidísima, de conflicto denso, interesante
y muy vigente, con diálogos que rozan lo magistral. Totalmente recomendable.
:-)
P.S. Qué cosas, entre sus páginas encontré un papelito amarillento impreso
con el siguiente texto:
Quote
ORGANIZACION SINDICAL
O.S. Educación y Descanso
EMBARCADERO
ESTANQUE DEL RETIRO
Embarcación nº ...........
Hora de desembarque ............
Personas: 1
Pesetas: 10 Nº 16854
Día ..................
Conserve este billete a disposición de los empleados que lo reclamen. Caso
de no tenerlo abonará otro billete.
Toda reclamación ha de hacerse antes de embarcar.
Todo aquel que se pase de su hora habrá de abonar el importe de un nuevo
billete sin derecho a seguir remando.
Este billete es nulo si va separado del triángulo de la derecha.
Unquote
:-DDDDDD